Dice el refrán que «el que sabe esperar, alcanza lo que quiere» , y los hermanos de San Juan supieron esperar dos años para reencontrarse de nuevo con Chiclana, y de qué manera. Una jornada espléndida que nos regaló la cofradía del Santo Patrón que hizo disfrutar a todas esas personas que se acercaron al centro el pasado viernes.
El día, en cuanto a lo meteorológico, fue una de esas jornadas perfectas para ver cofradías. No hizo calor en exceso y el viento estuvo calmado, dejando trabajar con tranquilidad a su encendedor Fran Ariza que una vez más iba dando luz a nuestro Patrón. La asistencia de público fue muy numerosa, se notaba que era un día laborable y esto ayudó muchísimo, la cofradía estuvo acompañada en todo momento.
La calle bodega de nuevo fue el momento TOP del itinerario, la bulla que allí se formó fue tremenda y no era para menos porque, lo que la hermandad preparó para ese instante, merecía la pena vivirlo in situ. Lágrimas de Dolores, una apuesta segura que, además de poner unos sones musicales de calidad, también arrastran a una cantidad de seguidores y eso en las calles se nota.
Por la parte de la hermandad, chapó. El estreno del tallado frontal y la peana deleitó a todos los cofrades que lo vieron en directo. Sin duda, será uno de los grandes pasos de Chiclana. El cortejo, por primera vez tenemos que decir que nos sorprendió gratamente, un cortejo muy bien organizado, muy juntito y pegado, sin grandes cortes y todos los hermanos de la cofradía vestidos con sus mejores galas para acompañar a su titular, el Patrón de Chiclana.
El punto negativo, los pocos hermanos con cirios que acompañaron a San Juan. Es una pena que una hermandad joven que está trabajando tanto y haciendo las cosas tan bien no tenga más hermanos que acompañen a su titular el día de la salida. Pero paciencia, todo llega para quien sabe esperar, y lo importante es que esta joven hermandad ha demostrado que hay ganas de trabajar y de seguir potenciando la devoción a San Juan y lo más importante, que Chiclana -cofrade o no- sepa que el 24 de junio es un día de fiesta en Chiclana -aunque toque ir a trabajar-.
Por Jorge Marcial